La defensora del pueblo de Río Negro, Adriana Santagti y Mariela Escuer, mediadora, trabajadora social, responsable del Centro de Mediación Ciudadana del organismo, estuvieron presentes en la mesa de apertura del Curso de Mediación Comunitaria desarrollado el pasado viernes por la tarde en la ciudad de Sierra Grande.
La capacitación fue articulada por la Municipalidad de Sierra Grande, el Ministerio de Seguridad y Justicia de Río Negro y el Ministerio de Justicia y DDHH de la Nación.
En la oportunidad Santagati expresó: “Los problemas de la gente son del tamaño de quien los vive, es decir, tenemos la responsabilidad de desarrollar nuestra empatía para poder interpretar, escuchar y darnos cuenta qué es lo que le está pasando a la otra persona”. Agregó que “las instituciones de la democracia tienen una gran deuda para con la sociedad y es la de generar confianza y esto lo logramos resolviéndole los problemas a la gente de una forma rápida, con eficacia y eficiencia”.
“Cuando la gente llega a las instituciones y, en particular, a la Defensoría del Pueblo, que es un órgano de derechos de garantías constitucionalmente reconocidas, lo hace porque viene fatigado de recorrer ventanillas sin respuestas”.
“El gran desafío es poder reconstruir los tejidos resquebrajados de la sociedad y, en este sentido, nosotros para brindar respuestas, apuntamos al fortalecimiento del diálogo y el contacto permanente con todas las instituciones de la administración y también, a través de la herramienta de la mediación”.
Santagati aclaro que “Si bien nuestra jurisdicción es provincial, también llegan a nuestra Defensoría una gran cantidad de problemas locales. Por eso veo como una decisión acertada, por parte del gobierno local, poder formar mediadores comunitarios y crear dentro del municipio el área de mediación comunitaria. En nuestra Defensoría la propulsora de la creación y responsable del Centro de Mediación Ciudadana es Mariela Escuer.
Por su parte, Escuer destacó: “En principio, pensamos en la creación del Centro de Mediación para poder encuadrar las respuestas a muchas demandas que no se ajustaban a la competencia de la Defensoría del Pueblo, como son los conflictos entre particulares”.
“Tenemos dos objetivos principales que son, por un lado, el de resolver los conflictos de los vecinos y, por otro, el de capacitar a las personas en el uso de las herramientas que brinda la mediación”.
En cuanto a la metodología de desarrollo del proceso de mediación que se realiza desde el Centro de Mediación de la Defensoría del Pueblo, su responsable, Escuer, explicó: la solicitud de mediación generalmente nos llega desde una de las partes implicadas en el conflicto. A partir de allí comenzamos a instrumentar una serie de pasos para llevar adelante la mediación que es gratuita, voluntaria y no judicial, que consta de una reunión en donde participan quienes forman parte del conflicto y son ellos, los propios protagonistas, los encargados en encontrar una solución a la problemática. La mediadora dirige el diálogo e intenta que las partes puedan resolver voluntariamente el conflicto de manera pacífica”.
Escuer aclaró que “fortalecemos en todo este proceso el valor de la palabra, independientemente que hay una formalidad porque se labra un acta que las partes firman y se hace un seguimiento del caso”.
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