“Es mucho más que una obra de infraestructura. Implica el reconocimiento del derecho humano al saneamiento y a un ambiente sano y representa la oportunidad para formular un plan de desarrollo de la ciudad junto a un conjunto de acciones de carácter socio-ambientales y urbanísticas de manera integral que acompañen el crecimiento de la ciudad”. Así lo expresó la defensora del pueblo, Adriana Santagati, durante la audiencia pública referida a la ejecución del Plan Director del Sistema de Desagües Cloacales de Viedma celebrada hoy en la ciudad capital.
Santagati comenzó su alocución diciendo que “el crecimiento demográfico y la expansión de la ciudad de Viedma hace imprescindible contar con una nueva planta de tratamientos cloacales que garantice un adecuado manejo de los efluentes residuales y limite la contaminación ambiental. En este sentido, adelantamos nuestro apoyo al Plan Director y ponemos de relieve el sistema de vertido cero que descargará los efluentes tratados para ser destinados a un sistema de riego”.
Resaltó por otra parte que “consideramos que llevar a cabo una gestión exitosa de un proyecto de saneamiento de esta envergadura necesita de una perspectiva estratégica que incluya una planificación urbana desde el gobierno local, para dotar de integralidad, equidad y sostenibilidad el proyecto que hoy se pone en debate”.
De forma específica mencionó que “es imprescindible la zonificación y regulación de usos de suelo con la definición de la Zona de Amortiguación a la redonda del sitio donde se ubique la nueva planta de tratamientos cloacales a fin de evitar problemas ambientales, porque se trata de sanear el agua del cauce del Río Negro y de resolver el servicio de saneamiento de la ciudad”. También mencionó la importancia que tiene incluir la gestión de residuos sólidos urbanos y que se incorpore la solución para los problemas que presentan los planes de viviendas FONAVI.
Además, la defensora del pueblo hizo referencia a la necesidad de conocer el destino que tendrá la actual planta una vez finalicen las obras enmarcadas en el Plan Director, en atención a la salud del río, y recibir información sobre cómo se proyecta la remediación en caso de ser anulada.
Destacó que “es imperioso adoptar medidas eficaces para impedir la degradación del ambiente” y, en este sentido, destacó que “solicitamos a la Secretaría de Ambiente una observancia precisa y un control exhaustivo del plan de gestión ambiental durante todo el desarrollo de la obra y durante su funcionamiento que incluya el monitoreo en sus diferentes aspectos: control del aire, del suelo, etc.”. Además, indicó que desde la DPRN se realizará el monitoreo de los organismos involucrados.
En el año 2010, la Asamblea General de Naciones Unidas Res. 64-292 declaró el derecho humano al agua y al saneamiento como un derecho humano esencial para el pleno disfrute de la vida y de todos los derechos humanos. Por su parte la Corte Suprema de Justicia de la Nación en el fallo “Kersich” de 2014, sostuvo que el agua es un componente del bien colectivo ambiente y que existe un derecho humano esencial al agua y al saneamiento.
“Este cambio de paradigma enfoca al agua y al saneamiento como un bien colectivo y un derecho humano antes que un servicio público”m expresó Santagati y consideró que “reconocer el saneamiento como un derecho humano lo convierte en titularidad legal y no en caridad”.
Al final de su exposición la defensora del pueblo señaló: “Es necesario comprender que el Plan Director para la ciudad de Viedma es mucho más que una obra de infraestructura. Implica el reconocimiento del derecho humano al saneamiento y a un ambiente sano y representa la oportunidad para formular un plan de desarrollo de la ciudad junto a un conjunto de acciones de carácter socio-ambientales y urbanísticas de manera integral que acompañen el crecimiento de la ciudad”.